Lunes, 01 de junio de 2009 Este capítulo no es para idiotas, es decir, no lo pueden entender los semi-retardados. Este capítulo lo entenderán muy pocos. Arte Ya hubo en Argentina un par de grupos que se opusieron a la poesía antigua. Decían que era “un pedantismo literario, que solo podía ser entendido por pocos”. Es relativamente obvio que quienes tales afirmaciones hicieron, han perdido la capacidad de apreciación de la armonía. Y no se puede esperar otra cosa en un mundo tan inarmónico como el de hoy. El organismo del ser humano se encuentra en caos al igual que su psiquis y por lo tanto es incompatible ya con los ritmos naturales. Solo el ritmo de la ciudad, del desorden, del bullicio, del agite, de la falta de tiempo, de la pornografía, la bebida y discotecas, solo esto es aceptado por la gran mayoría. Cuando una ciudad se queda sin electricidad, la gente se desespera, maldice, se aburre, se llena de ira. Muy pocos miran al cielo, respiran hondo y contemplan su mundo, s
Aquí encontraras el camino a la verdad.